Juan Mendoza Domínguez, conocido artísticamente como El Niño de Utrera (por haber nacido en esta flamenquísima población sevillana), tiene una canción en la que se expresa, con otras palabras, la opinión de que el amor es ciego. Se trata de la copla (en su variante zambra, por el sabor «moruno» que, sobre todo en los compases iniciales, tiene) titulada <<Colmao del puerto>> y reproducida en el siguiente vídeo de Youtube (un colmao es un establecimiento en el que se organizan las llamadas juergas, con cante flamenco, comida y bebida).
ESPAÑA. Niño de Utrera: “Colmao del puerto”.
LETRA DE LA CANCIÓN:
Colmao del puerto que da a la bahía, en donde un mal día caímos los dos. Me distes tus besos, te di yo mi vía [= vida] y nuestros destinos allí juntó Dios.
Qué importa que digan que voy yo con otra. Son cosas de hombres. Escúchame a mí. No quiero, chiquilla, tus ojos nublaos [= nublados]. Qué importa que digan. Poder decir.
Corazón, no te atormentes. Corazón limpia ese llanto. No te importe de la gente…, no te importe de la gente que siempre murmuren tanto. El querer nunca razona. Si te dicen que traiciona, no hagas caso de la gente. Tú tienes que ser valiente. Quien más quiere, más perdona.
Aquella flamenca, malina [maligna] persona, que de oro y brillantes tu amor coronó se fue con un payo. Tiró su corona, y al verte sufriendo te dijo asín [= así] yo:
Qué importa que digan que fue con el otro. Son cosas de hombres, y mala gachí. No quiero, chiquilla, tus ojos nublaos. Qué importa que digan. Poder decir.
Corazón, no te atormentes. Corazón limpia ese llanto. No te importe de la gente…, no te importe de la gente que siempre murmuren tanto. El querer nunca razona. Si te dicen que traiciona, no hagas caso de la gente. Tú tienes que ser valiente. Quien más quiere, más perdona.